El senador Hernán Larraín salió al paso de las críticas sobre el aumento de las asignaciones parlamentarias a los senadores, que hoy la cámara alta decidió aprobar. El legislador explicó que los recursos son para los gastos operacionales de la función parlamentaria, es decir, arriendo de oficinas, remuneraciones de personal, entre otros ítems.
Al respecto Larraín explicó “a partir de la última bonificación de la ley orgánica del congreso, se estableció un mecanismo autónomo para definir cuales eran las asignaciones, la forma que se gastaban, el modo como se rendían y la forma de auditar y las rendiciones de cuenta. Se creo para ese efecto, un consejo de asignaciones de todo el congreso, que es el que hace estas determinaciones y esta integrado por personas que no pertenecen al congreso, no son ni senadores ni parlamentarios, son personas ajenas a esta institución, y resuelven en forma completamente autónoma”.
En ese sentido, Larraín comentó que “ los recursos que se asignan son definidos por esta comisión, sin que los parlamentarios puedan hacer otra cosa que formular consultas o solicitudes. En particular en esta situación,la comisión designación en el congreso determino que el monto de las asignaciones parlamentarias para los gastos de operación, de contratación de personal y otros gastos de las oficinas parlamentarias del senado, eran insuficientes y acordó incrementar esos gastos, en 2 millones de pesos”.
Consultado por la razón de este aumento el senado indicó que “la asignación preliminar que se hizo solamente aprobó aumentar el gasto de los diputados, en cerca de un 20%, mientras que los gasto de los senadores quedo exactamente igual. Por lo tanto, ocurría que un senador que puede tener dos o tres o cuatro distritos, tenía prácticamente los mismos ingresos que un diputado para efectuar el trabajo personal. La comisión de asignaciones del congreso, acordó hacer un aumento de estos recursos en la medida que ellos no significase un incremento del presupuesto del senado”.
Finalmente, el parlamentario aclaró que” en ningún caso se trata de recursos que vayan para el uso personal del senador, no forman parte de su sueldo ni remuneración y no constituyen un aumento de la dieta. Los ingresos personales del senador, están determinados por la constitución y corresponden a l mismo sueldo de un ministro de estado, así lo dice la constitución y así opera desde siempre. El gasto administrativo hoy esta definido y determinado por instituciones ajenas al congreso y es controlado debidamente con el fin de asegurar el debido destino de esos recursos, lo cual hay que rendirlos hasta el ultimo centavo”, remató.