Las temperaturas bajo cero que tanto afectan
a la población, podrían no perjudicar al mundo agrícola. El docente Dr. Marcos
Carrasco-Benavides, de la Escuela de Agronomía de la Universidad Católica del
Maule (UCM), explica que en esta época son pocas las plantaciones que podrían
verse afectadas, ya que están con receso invernal.
Es así como los efectos de las heladas en
frutos y verduras dependerá, según Carrasco-Benavides, del origen de las
heladas, su duración y la etapa de desarrollo en la que se encuentre el
cultivo. Lo anterior, determinará el daño que se produzca.
“Por ejemplo, si en un huerto de frutales de
hoja caduca, como manzanos o cerezos, se produce una helada en el período donde
los árboles se encuentran en receso, ésta no generará ningún daño. Si este
mismo evento se produce en un huerto de frutales de hoja persistente como
paltos, el daño será importante. Es por ello que antes de seleccionar el lugar de
plantación y el tipo de cultivo, es necesario hacer un estudio de las
condiciones agroclimáticas y analizar los posibles riesgos de heladas en la
zona. Cuando el cultivo ya está establecido y existe el riesgo de la presencia
de heladas, sólo queda ver los medios para reducir sus daños”, explica el
académico de la UCM.
Y agrega que existen cultivos que dependiendo
de su estructura pueden resistir un cierto nivel de heladas, pero en general
esta resistencia estará determinada por la intensidad y duración del evento.
“El común de las personas dice que “la helada
quemó el cultivo”, inconscientemente haciendo referencia a que la muerte de las
células se ve reflejada en la necrosis parcial o total de tejidos y órganos
tales como flores, yemas y frutos”, aclara.
En cuanto a las medidas de prevención,
Carrasco-Benavides, aseguró que, si bien la tecnología puede ayudar, es
importante destacar que “la efectividad de los métodos de control ha sido
indicada como relativa, donde el éxito va a depender del funcionamiento
continuo de los equipos durante todo el tiempo que dure el evento, además de la
capacidad de cubrir una mayor superficie”, dijo.
Es por esto, que se recomienda, antes de
instalar un método, hacer un estudio agroclimático para evaluar los eventuales
riesgos de heladas.