“La vulnerabilidad ha ido aumentando en la medida que las lluvias se retrasan y lamentablemente no hay muchas condiciones favorables para el presente año”, dijo el académico y agroclimatólogo de la Universidad de Talca, Patricio González, esto luego de la de la decisión de racionar el agua potable para consumo humano en Vichuquén.
El experto sostuvo que si bien el Maule, en un inicio, no estaba considerada dentro de las zonas vulnerables, la condición ha ido cambiando en la zona costera. “La llegada de población flotante que superó en más de un 40% a la población normal que tiene durante el resto del año y la poca agua disponible, no fue suficiente para cubrir esas necesidades y es por eso que, en el caso de Vichuquén, se tuvo que hacer racionamiento de agua potable”, dijo.
“Esa vulnerabilidad que presenta el área de la costa, que no tiene recursos de agua superficiales sino que de napas subterráneas que se han ido profundizando por la sequía, con el transcurrir de febrero, marzo y abril, puede extender el racionamiento a otros sectores del secano, y eventualmente hacia el Valle Central en la medida que las precipitaciones se retrasen en su inicio”, agregó.
González sostuvo que el verano se ha ido extendiendo hacia los meses de marzo y abril, incluso con días de calor sobre los 25 grados. Indicó que los meses de mayo, junio y agosto se han refundido en una estación “otoño-invierno”, por lo cual dada las condiciones de bloqueo anticiclónico y cuyas causas no han variado en los últimos 10 años, es poco probable que tengamos un inicio de precipitaciones en marzo, e incluso en mayo.
“Eso –obviamente-aumentará la vulnerabilidad desde Valparaíso al Maule respecto de la disponibilidad de agua potable. El Mataquito, prácticamente se ha ido secando. Otras áreas como Radal Siete Tazas y el Salto del Laja han disminuido. Eso es preocupante porque la nieve tampoco está presente para aumentar estos ríos y las napas subterráneas se han ido profundizando”, recalcó.